Los que nos autodenominamos cultivadores de cannabis medicinal solemos echarle las culpas a la semilla cuando, transcurridos unos días del proceso de siembra, esta aún no ha germinado. Esto suele ser un error, ya que las semillas de marihuana presentan una germinación de casi el 100% de los casos. Así que si no es culpa de la semilla… es culpa tuya.
Posibles motivos por los que tus semillas de cannabis medicinal no germinan
- Dejarlas en un plato con servilletas húmedas: el riesgo de que se sequen es altísimo (no mucho menos que el de que se nos pudran por pasarnos con el agua).
- Dejarlas en un vaso de agua: este método puede ser mortal para las semillas si el agua baja de los 20º centígrados, por lo que si no lo haces en verano… lo tienes muy complicado.
- Directamente en un Jiffy o maceta: si plantamos la semilla de marihuana medicinal directamente en la tierra, corremos muchísimos riesgos. Entre ellos que si la semilla tarda más de 48 horas en germinar, se puede secar la tierra superficial y detener el ciclo de humedad, cosa que será fatídica para la semilla. Por no mencionar que si la regamos sin haber germinado, podemos desplazar la semilla muy arriba o muy abajo en la maceta, es decir: o la secas o la pudres.
El método más eficaz para germinar tus semillas
La solución es muy simple (y mucho más segura): SIEMPRE debes germinar la semilla antes de plantarla… ¿Cómo? Pues en un tupper con servilletas húmedas. Conseguirás que el agua no se evapore si lo mantienes cerrado. ¿Cómo mantenemos la temperatura? En verano en un cajón y en invierno encima del router de Internet. Fácil ¿no?
Pasen los días que pasen, nuestras semillas germinarán, tarde o temprano, pruébalo y cuéntanos tu experiencia.
En mi opinión casi siempre que tenemos problemas con la germinación de las semillas es por pasarnos con el agua.
Esta interesante